En 2023 el desempleo cayó a un mínimo histórico de 4,8% en Bahía Blanca

Los datos del INDEC indicados para el partido de Bahía Blanca muestra una curiosa relación, por un lado cayó la tasa de desempleo a cifras históricas pero también disminuyó la tasa de empleo.

En la tarde de hoy el INDEC difundió las estadísticas del mercado laboral del último trimestre del 2023, a pesar de la inestabilidad económica vivida en el segundo semestre por el clima electoral y el fuerte impacto de la sequía, los números de empleo continuaron siendo positivos en el último año.

En Bahía los números del 2023 son superiores a los niveles de la prepandemia la tasa de empleo había alcanzado un máximo histórico en el segundo trimestre de 2023 superando el 48% de la población y con 46%, el empleo del cuarto trimestre aún se encuentra por encima de su promedio histórico (43%).

Lo curioso en los últimos meses del año pasado es que la tasa de desocupación continuó disminuyendo alcanzando un nuevo mínimo histórico 4,8% mientras que en 2022 el número era de 6,5%

Sin dudas números que a priori uno podría celebrar pero la estadística demuestra una gran preocupación e interrogantes sobre que pasará en un 2024 fuertemente recesivo. Las caídas simultáneas de la desocupación y el empleo es resultado de la disminución de la tasa de actividad.

Por lo general si baja la tasa de empleo tiende a subir la desocupación, pero vemos que eso no ocurrió según el informe de INDEC. Lo cierto es que en el último trimestre de 2023, unos 5.000 bahienses se retiraron del
mercado de trabajo y aquí entran las preguntas, ¿Qué pasó con ese porcentaje de trabajadores que quedó sin empleo pero no buscó otro?

En el plano nacional la tasa de empleo aumento a un 48,6%, lo que refleja 1 punto por encima de 2022 y una baja del desempleo al 5,7%, manteniendo el mismo número que en el tercer trimestre del 23.

Es de esperar que estos números claramente empeoren a partir de la asunción del gobierno de Javier Milei, el freno de la obra pública, los recortes en el sector público, y la caída de producción y ventas que golpeará al sector privado dejará sin dudas un gran aumento del desempleo y una caída en la actividad.