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LA REGIÓN

Histórico: Casi 20.000 bahienses salieron a las calles a defender la Universidad Pública

Bahía Blanca mostró su perfil universitario y llevó adelante una nueva movilización con una amplia convocatoria y comienza a quitarse el mote de ciudad poco adepta a manifestarse.

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Si la movilización del 23 de abril muchos decían que pudo ser la marcha con mayor convocatoria en la historia bahiense, sin dudas este 2 de octubre rompió todo registro.

Una interminable columna de gente recorrió la Avenida Alem uniendo las dos universidades nacionales que se encuentran en el Sudoeste Bonaerense, inició en la sede de la UTN y finalizó en las escalinatas de Alem 1253, fachada icónica de la Universidad Nacional del Sur.

De acuerdo al reporte de agentes de seguridad y brigadistas, en una movilización en la que las familias bahienses caminaron por la calle mas emblemática de Bahía Blanca con total tranquilidad, la asistencia habría sido entre 18.000 y 20.000 personas.

A diferencia de la primera Marcha Federal Universitaria, en este caso se tuvo una mayor organización e incluso mas «aparato» donde sindicatos y agrupaciones políticas no dudaron en mostrar sus banderas, sus remeras y sus cánticos en contra del gobierno de Milei.

La movilización inició cerca de las 17:45 hs encabezada por autoridades universitarias, trabajadores del sistema universitario, alumnos y científicos, mas atrás se iban encolumnando personas independiente sin identificación partidaria, jubilados, agrupaciones políticas y sindicatos.

Los gremios docentes tuvieron un número importante de participantes, especialmente los universitarios, ATE también desplegó gran cantidad de banderas, lo mismo que la CTA y SUTEBA.

En cuanto a gremios de la CGT sin dudas el mayor color y número de asistentes lo puso UOCRA «Cerca del 70% de los que están acá quizás no terminaron el secundario pero el 70% de los que tienen hijos están en la educación y en la universidad pública» mencionó a este medio Carlos Boer, el secretario general de UOCRA Bahía y triunviro de la CGT.

Fue tal la cantidad de trabajadores de las construcción que se sumaron a la defensa de la educación que la columna inició en la sede de calle Saavedra y desde allí pasaron por Mitre y Rodríguez, esquina de la CGT, luego continuaron caminando por calle Rodríguez hasta Alem y allí se posicionaron en la parte casi final de la extensísima fila, se estima que UOCRA movilizó cerca de 3.000 constructores quienes llevaron sus overoles, cascos, entonaron las típicas canciones, desplegaron banderas y pusieron color con bengalas de humo.

Otros sindicatos con gran participación fueron Comercio, Camioneros, Urgara, Luz y Fuerza, La Bancaria, AEFIP, SMATA, Municipales. Al desconcentrar la marcha se pudo ver que la Avenida Alem no reportaba mayor suciedad en las aceras ni existencias de bebidas espirituosas, un trabajo que ha hecho la CGT en pos de evitar argumentos banales con críticas que minimicen y distorsionen la discusión y el debate político.

RECADO PARA EL GOBIERNO NACIONAL DESDE EL SUR BONAERENSE.

Si bien en los últimos años la política ha adquirido un mayor carácter de ambacentrismo, bajo la premisa de «que no explote el Gran Buenos Aires» el interior también se expresa y se muestra predispuesto a jugar en la política nacional.

En Bahía Blanca, Javier Milei logró el 63% de los votos en segunda vuelta, en menos de un año los bahienses colmaron las calles en tres ocasiones. En primera oportunidad fue en el mes de enero, a 45 días del gobierno libertario recién asumido, bajo un sol abrasador y en horas del mediodía unas 10.000 personas se manifestaron en las calles céntricas en contra del DNU y la Ley Bases.

Las siguientes dos marchas, los que viven entre el océano y la pampa mostaron el carácter de ciudad universitaria que tiene Bahía Blanca. En abril se movilizaron mas de 15.000 bahienses y en esta oportunidad se calcula que hubo unas 3.000 personas que aquel 23 de abril, por consecuente este 2 de Octubre será recordado como la marcha con mayor presencia de bahienses en las calles y comienza a quitarle a Bahía el mote de «ciudad fría y careta»