LA REGIÓN
Informes de CAME y Camarco generan preocupación en mercantiles y obreros
CAME publicó las estadísticas de enero 2024 y la situación es dramática y Camarco solicita interlocutores para reactivar un sector que tracciona fuerte en la economía.
La idea del aislacionismo de Bahía Blanca que le permitiera llevar de mejor manera la crisis económica reinante parece diluirse. Las obras nacionales se detuvieron y la caída en los comercios pega fuerte en todo el país, la incertidumbre en cuanto a qué sucederá con empresas claves como YPF pone un manto de dudas respecto a las inversiones que se esperan en la zona industrial bahiense.
CAME informó que la caída en las ventas minoristas fue de un 28% promedio, pero con sectores que tienen una facturación 45% menos que el primer mes del año pasado como es el caso de farmacias. Otro sector fuertemente golpeado por la pérdida del poder adquisitivo es el de ventas de alimentos y bebidas que cayó un 38% «va a ser difícil que muchos comercios resistan mucho mas tantas caídas, si esto no repunta habrá recorte de personal seguramente».
Esto mencionan desde cámaras del comercio, mientras que del lado del sector sindical advertían, tras el cierre de paritarias de 2023, que el año 2024 será un año donde las negociaciones de paritarias también se esté mirando los índices de desempleo al momento de acordar incrementos salariales.
Por otro lado Camarco declaró el estado de alerta en las empresas del sector y pide por retomar el diálogo político con algun funcionario de renombre del gabinete nacional. Esta mañana en Radio Urbana Diego Moguiliansky, presidente de CAMARCO local, reconoció el despido de trabajadores: «Se ponen en juego cerca de 200.000 puestos de trabajo en todo el país y 1.400 empresas que pueden ir a la quiebra. Desde septiembre que no cobran y no se pueden mantener los gastos fijos mucho tiempo sin cobrar un peso. En Bahía Blanca cualquier colega te dice que tuvo que despedir gente».
«Estábamos muy esperanzados en la ciudad, tratando de prepararnos para grandes inversiones. Pero hay tanta incertidumbre que no podemos asegurar nada a esta altura. El Puerto es el único lugar donde hay otra capacidad para seguir con obras» explicaba Moguiliansky respecto a esa esperanza bahiense que reinaba con fuerza hasta los últimos días de diciembre